sábado, 28 de julio de 2012

La tarea de domesticar a un gato feral


¡Hola!
En estos casi 11 años que llevamos de ayudar a gatos en situación de calle -muchos de ellos por cierto ferales y huraños- hemos ido aprendiendo a como convivir y acercarnos a ellos, no es tarea fácil, requiere de mucha
paciencia y mucho tiempo. El gato no cambiara de un día para otro, pueden pasar hasta meses y en algunos casos años, por lo cual muchos prefieren regresarlos al lugar donde los rescataron previamente esterilizados para evitar su procreación, otros al no ser candidatos a ser adoptados quedan como residentes permanentes en el refugio o casa de su rescatador, si corren con esa suerte, me he enterado que en casos extremos han sido sacrificados al no ser adoptables o llevados a " granjas" donde se les deja ser libres (¿?), estas "granjas" no se encuentran, obviamente en el D.F. y yo su servidora dudo de su existencia.

¿Qué hacemos nosotros cuando llega un gato feral?

Primer Paso: ya en el refugio.

No lo forzamos a salir inmediatamente de la gatera, lo dejamos tranquilizarse, se le pone agua, comida y lo dejamos en un lugar tranquilo, eso sí, no aislado, ya que el objetivo es que se acostumbre a los ruidos y movimientos de su nuevo habitad.

Segundo Paso: a ganarse su confianza.

Estando dentro de la trasportadora comenzamos a hablarle, tratamos de tocarlo y ver como reacciona, si vemos que la respuesta es positiva continuamos así sin sacarlo, esto puede tomar un par de días, la respuesta nunca va a ser inmediata.
Si no tenemos respuesta positiva, seguimos intentando pero sin tocarlo, ya que se estresa mas y fomentamos mas su desconfianza.

Tercer Paso: si obtuvimos respuesta positiva a dejarlo ser.

Cuando vemos que el gato en cuestión esta respondiendo según nuestras expectativas, comenzamos a dejarle la puerta de la transportadora abierta, no saldrá inmediatamente, hay que tenerle paciencia, él saldrá tarde o temprano, claro que su instinto será de esconderse en otro lugar donde él se sienta más seguro y lo hará, por eso en este paso le ponemos un collar con cascabel, dejamos comida y agua cerca de donde sabemos o suponemos se esconde. Con el collar sabremos donde se localiza cada que se mueva fuera del lugar que se escondió, nos ayuda también a saber si va a comer y al arenero común.

Que sigue: respetar y observar

Ya nuestro feralito dio un gran paso al salir de su aislamiento, recorre la casa por las noches, come y va al arenero cuando no se le ve. Poco a poco empezará a salir de día, la curiosidad gatuna puede más, lo dejamos que observe sin que intervengamos en nada, hacemos de cuenta que no esta y lo dejamos ser.
Muchos ferales en esta etapa comienzan a tener confianza de nosotros, otros tardan más, otros simplemente nunca la tienen pero toleran a las personas.

Si vamos bien: seguimos así, comenzara a acercarse más a ti y a no esconderse tanto, tendrá más confianza de que no lo vas a dañar y que está en lugar seguro, aquí comenzamos a jugar con él, una cuerdita un palito pero sin tocarlo.
Si en este paso se llega a sentar junto a ti ya sea en el sillón o donde estés, continua haciendo tus labores normales, poco a poco intenta acariciarlo, si huye, dale tiempo, si se forza tu trabajo se irá a la basura, si acepta la caricia, hazlo hasta donde él quiera, no intentes cargarlo, no lo permitirá.

Si ya logramos todo esto: seguimos con la terapia aplicada.

En esta etapa el gato ya no se considera feral, ya que acepta caricias, no muerde, rasguña o bufa, si te acercas no se esconde y es mas sociable y si hay otros gatos en casa y convive con ellos sin pelear, vamos bien!, seguimos con lo que se está aplicando y veremos como cambia día con día nuestro refugiado.

Todo es cuestión de dedicarle mucho tiempo, paciencia y cariño a un gato que muy probablemente sufrió maltrato antes de arrojarlo a la calle, fue abandonado por que ya no lo querían o simplemente nació en la calle y no sabe lo que es tener un hogar donde lo quieran, cuiden y den cariño,
Te invito a intentar estos simples pasos, requiere de mucha paciencia, tiempo y confianza en que tu puedes ayudarlo a ser un gato exferal cariñoso y adoptable
Personalmente a mi me ha costado hasta 2 años domesticar a un feralito y esto no me ha hecho desistir de seguir haciendo lo que hago por ayudarles.

Vuelvo a aclarar, no todos los gatos reaccionan igual, algunos dejan lo feral pero se vuelven huraños o muy reservados, toleran al ser humano pero nunca dejaran que te acerques a ellos, en esos casos, dejamos al gatito ser tal como es y no forzamos a nada.

Saludos.

PD: olvide mencionarles que en todo momento hay que llamarlo con el nombre que se le dio al llegar al refugio.

1 comentario:

  1. Hola! Quisiera hacerte una preguntas adicionales sobre la convivencia con gatos ferales, acabo de adoptar uno. Necesito conversar más con alguien que sepa cómo comportarse con ellos para hacerlo yo de la mejor manera posible.

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